Reseña: Crónica de una muerte anunciada - Gabriel García Márquez

Titulo original: Crónica de una muerte anunciada
Autor: Gabriel García Márquez
Editorial: Diana
Páginas: 125
ISBN: 968-13-1247-3

El día que lo iban a matar, Santiago Nasar se levantó a las 5.30 de la mañana para esperar el buque en que llegaba el obispo.

Había soñado que atravesaba un bosque de higuerones donde caía una llovizna tierna, y por instante fue feliz en el sueño, pero al despertar se sintió por completo salpicado de cagada de pájaros. «Siempre soñaba con árboles», me dijo Plácido Linero, su madre, evocando 27 años después los pormenores de aquel lunes ingrato. «La semana anterior había soñado que iba solo en un avión de papel de estaño que volaba sin tropezar por entre los almendros», me dijo. Tenía una reputación muy bien ganada de intérprete certera de los sueños ajenos, siempre que se los contaran en ayunas, pero no había advertido ningún augurio aciago en esos dos sueños de su hijo, ni en los otros sueños de los árboles que él le había contado en las mañanas que precedieron a su muerte.

Tampoco Santiago Nasar reconoció el presagio. Había dormido poco y mal, sin quitarse la ropa, y despertó con dolor de cabeza y con un sedimiento de estribo de cobre en el paladar, y los interpretó como estragos naturales de la parranda de bodas que se había prolongado hasta después de la media noche.

Cortesía de Librería Porrúa

Opinión Personal:

¡Y vaya que está anunciada! Masticada en al menos cuatro horas y digerida en el doble de tiempo, “Crónica…” marcó mi alimentación literaria, constituyó una base indispensable para ella y es una de las primeras novelas que me aventuré a leer (ya saben, yo no leía otra cosa que no fuese Harry Potter). En pocas palabras, le tengo muchísima estima.

La cosa es que no es una novela como otras que he leído, que se limitan a ir narrando los hechos cronológicamente o que si hacen saltos en el tiempo, lo hacen solo una vez y ya no vuelven a narrar el suceso nuevamente. Ah, pero “Crónica…” sí lo hace. El tiempo es alineal y hay muchos retrocesos. En cierto punto me resultó desesperante, porque tenía que prestar atención y recordar cada unos de esos sucesos que podían ser referidos en las futuras páginas. El vaivén del tiempo parece ser interminable, pero le da un toque especial: es un factor positivo.

Esta historia no presenta descripciones profundas de los personajes ni de los escenarios. Así que no esperen poder imaginarlos con ayuda del libro, tendrán que poner de la cosecha de su imaginación. Nos enfrentamos a un escrito que de entrada te dice el final: la muerte de Santiago Násar. En el pueblo, el rumor se corre entre sus pobladores pero no muchos llegan a creer que los gemelos Vicario realmente tengan el valor, o lo que se necesite, para matar a Santiago Násar. Muchos piensan que sólo son habladurías de unos muchachitos, así que jamás dan aviso a la familia, ni al muchacho que será asesinado. Y quienes han tomado los rumores por hechos, han enviado mensajes de prevención a Santiago y a su madre, pero las advertencias jamás llegan a sus destinatarios… ¿Qué es lo que mueve a los personajes a pasar solo el rumor y no a tomarlo como un hecho? ¿Por qué no llegaron las advertencias? ¿Los gemelos Vicario desperdigaron sus intenciones con el propósito de que los detuvieran? ¿Era necesario matar a Santiago?

Lo maravilloso de esto, es que Gabriel García Márquez se las ha arreglado para contar una historia a través de los puntos de vista de muchas personas, y por si fuera poco, de él mismo. Sí, Gabriel conoció a Santiago Násar. Y ahora, muchos años después, ha regresado al pueblo en el que la muerte fue anunciada y ha recopilado todas las versiones, comentarios, pensamientos de los hechos. En algunas ocasiones coinciden, en muchas otras se contradicen. ¿Pero no es la realidad así? Todos tienen algo que agregar, algo que añadir, porque cada persona percibe al mundo de una manera distinta. Además, la historia hace referencia a temas sociales que se dan aun en nuestros tiempos: el machismo, la justicia a mano propia, cuestiones de honor, mentiras, la ambición y los matrimonios arreglados.

Sí, es un poster de pelicula.
(Ó___Ó)

En esta novela/crónica el punto no es descubrir qué es lo que pasa al final, eso ya no los ha ahorrado el narrador en el primer párrafo, sino conocer las versiones de los que presenciaron el hecho, conocer más detalles de éste, enterarse del qué ocurrió después y de formar opiniones y conclusiones propias.

Finalizando la reseña, recomiendo ampliamente “Crónica de una Muerte Anunciada”. No es lo que normalmente se encuentra en una obra narrativa, pero tendrán la dicha o desdicha de poder leer la obra completa, formar los sucesos linealmente y reflexionar sobre los temas que trata.

Ñam, es todo. ¡Hasta pronto!

Ana Arcia.