Autor: Anissa B. Damom
Ediciones Ámbar
Páginas: 456
ISBN: 139-788-492-687-077
Voy a darte los tres consejos que a mi no me dieron.Este es el primero: “Olvida todo lo que te han contado: los vampiros no existen, los lobos son solo animales y los magos, las hadas y los duendes se encuentran encerrados en grandes tomos de hojas desgastadas”.Quiero mostrarte la otra cara del mundo. Un lugar donde el peligro se enmarca en perfectos rostros de porcelana perlada, el amor es como una bestia salvaje sedienta de sangre que acecha y te arranca el corazón mientras estás dormido y la felicidad... la felicidad es un delito que se paga muy caro.
Me persuade a menudo la idea de que se refugia en los libros incitada por nuestra tediosa compañía.Opinión Personal:
No
sé cómo empezar. Tengo una sonrisa idiota en el rostro porque no quiero creer
esto: mi mala suerte literaria está al tope. Desde la lectura de Ciudad de Ángeles
Caídos he tenido una malísima racha en la lectura (pasando por Hush, Hush y
Firelight) y Éxodo se suma a la lista. ¡¿Qué diablos pasa conmigo que los
libros no me gustan?! Bueno, ya, que la seriedad venga a mí.
Comencé
a leer éste libro porque su portada me llamó mucho la atención y porque la
mayoría de las reseñas que busqué y leí lo ponían como bueno. Ni siquiera la sinopsis
fue impactante, a decir verdad. Pero bueno, le di la oportunidad. Y así fue
como comencé… Las primeras líneas fueron llamativas. Estuvieron bien. Continué
leyendo y ¡oh, cielo santo! En algún momento hablé a las letras.
Yo:
¿Bella Swan, qué estás haciendo aquí? ¿Estás perdida?
Bella
respondió: Decidí venir a flirtear con otros personajes más, no me es
suficiente con Edward y Jacob; ahora me llamaré Lena DeCote y he traído a Alice
también, se llamará Lisange.
Entonces
Christian Dubois interrumpió nuestra conversación y Bella, ahora Lena, saltó hacia
él y le juro amor eterno no’ más con verle.
Christian es el chico malote, por repetición, (leí en algún lado que
realmente era malote) y que es más mancito que un minino recién nacido. Oiga,
pero que los mininos son adorables y Christian solo me revolvió las tripas
porque me recordó demasiado a cierto vampiro brilloso que responde al nombre de
Edward Anthony Masen. Pero ni siquiera me conquistó como él lo hizo en su
momento.
Por
milagro divino me llegaron fuerzas y continué leyendo y leyendo, esperanzada de
que algo mejorara. Y aquí va algo, que no creo que sea mucho SPOILER
pero igual pongo la alerta: Lena
acude a Christian y le suplica que acabe con ella. HAHAHA. Les juro que colapsé
en ése momento. ¡AAAAAAAAAAAAAAGHHH! Por supuesto, él también se siente atraído
por ella y poco a poco, comenzará a amarla porque ella es especial. Ella estuvo
destinada a él. Fue como leer Crepúsculo otra vez, pero como he dicho en
muchas otras ocasiones, leer Crepúsculo fue satisfactorio en su momento y esto
NO LO ES.
Creo que ya he
expuesto lo primordial:
mi aversión a los personajes principales. El ritmo: es muy lento. La narrativa: no está mal, Damom
lo hace bien, pero como todo está contado desde la perspectiva de Lena, me
jodió. De joder, joder. Los diálogos:
muy repetitivos y falsos. ¡ALTO! Hay algo muy bueno aquí que no he mencionado y que ya es
tiempo de hacer: O R I G I N A L I D
A D. Damom creó tres tipos de criaturas de las que yo jamás había
leído. Fue algo muy chuli, pero desgraciadamente no explotó mayoritariamente la
esencia de estos seres y la historia sólo se concentró en Lena y Christian,
Lena y Christian, Lena, Christian y otros más.
Hubo
momentos en que las cosas marchaban bien. Lena dejaba de ser una Bella en
potencia y entonces, ¡bamf!: Chabela Swan estaba de regreso. No hubo momento alguno en que yo me emocionara, en el que me
sintiera ligada con los personajes o algo, por muy pequeñito que fuese.
Tenía la esperanza de que los últimos capítulos fuesen buenos, pero no. Incluso
me sorprendí porque el final fue demasiado sin sentido, al ahí se va. Pero para
ser honesta, no estuve decepcionada porque no me sorprendí en ningún momento en
el pasado. Y sí, ¡hice fiestototóta cuando vi el punto final! ¡Lo terminé!
En conclusión: una idea muy original que murió gracias a su protagonista, a
algunos otros de sus personajes y a la falta de acción y emoción en la trama. No lo recomiendo.
Quizá toda ésta vida sea solo eso, una pesadilla.Pd: De antemano, lo siento. Siento no haber sido muy objetiva, pero es que… era la única forma de hacerlo.
Pd
2: Incluso le faltó amor para describir a los mininos de los DeCote.