Reseña | Corazón de tinta - Cornelia Funke (Corazón de Tinta #1)

Cuando era niña, me gustaba mucho Brendan Fraser (por George de la Selva y La Momia); nunca lo dije en ese entonces y no es hasta ahora que lo acepto. Hacer comentarios de ese tipo con mi familia me apenaba demasiado  ◎-◎ En fin, me estoy yendo por las ramas. FOCUS, ANNA! Cuando vi el trailer de Inkheart, sentí que se me erizaba la piel: no solo por Fraser, sino porque la historia va de los libros y de la maravillosa idea de sacar los personajes de las historias. Cuando te apegas demasiado a un libro, serie o película, cuando buscas encontrar un poquito de felicidad escapando a otros mundos, deseas que esos personajes estén a tu lado o viajar al mundo de ellos; deseas que dejen de vivir solo en tu mente, cuando lees sobre ellos o en todo caso, si los ves en la pantalla. Deseas que sean reales. Obviamente, hablo desde mi experiencia: hace muchos años, le escribía cartas a Charlie de Las ventajas de ser invisible y a Draco Malfoy. Me sentía muy incomprendida y ellos eran mi soporte. A veces ellos se sentían más cercanos que muchas otras personas y deseé simplemente poder tenerlos a mi lado para abrazarlos y sentirme menos sola. 

Así que cuando vi la adaptación de esta novela, decidí que tenía que leerla. 

¡Es un honor presentarles a esta preciosidad!

Ahora que ya he parloteado sobre cómo lo conocí y cómo me enamoré de su idea central, solo tengo que decirles que no pude reseñar esta novela de una forma más corta. Así que tomen algo para comer, beber y a acomodarse rico.



¡Todos a leer la novela ahora mismo, YA!

Corazón de tinta comienza presentándonos a una familia de dos: Mortimer, el padre, y Meggie Folchart, la hija. Mo, como lo llama su hija de cariño, es encuadernador; así que se dedica a viajar por el continente europeo en busca de pacientes de papel que pueda reparar. Se puede decir que Mo es un doctor de libros: los toma en sus manos, los cura, les da una segunda oportunidad de vivir. Meggie ama los libros tanto como su padre y pronto ella nota que los viajes no solo se hacen por trabajo: Mo busca un libro en particular. 

Tengo que hacer una pausa aquí: cuando digo que ambos aman los libros, es porque es así. Podría citarles todas las frases en las que se describe el escenario que rodea a ambos personajes. Hay libros bajo las almohadas, para que cuando la lluvia levante a Meggie, ella pueda leer. Y ella puede sentir cómo las páginas le susurran prometiendo una historia entretenida. Mientras, Mo se queda también bien entrada la noche leyendo y se dice que a ambos les cuesta encontrar el camino al mundo real desde el otro mundo, desde el laberinto de las letras. Además, los libros se amontonan por todas la casa. No están en libreros, perfectamente acomodados para que sean admirados por sus lomos y portadas bonitas; están en todos lados porque ya no caben, están sobre las sillas, en la cocina, en el ropero, por montoncitos y montones. Siempre están presentes. En esta novela, se habla de los libros, de cómo cambian cuando los lees en un lugar diferente, de cómo te dan la bienvenida a casa, de sus olores y sus páginas nuevas o viejas; se habla de cómo los libros atesoran tus recuerdos. 

Algunos libros han de ser paladeados, otros se engullen, y sólo unos se mastican y se digieren por completo.

Y así como se puede palpar el amor por los libros en esta novela, también se puede sentir el lazo cercano que une a Mo y Meggie, Ella lo adora, lo idolatra, lo único que podría reclamarle es el hecho de que Mo jamás le quiere leer nada en voz alta; ella jamás podría mentirle y él tampoco a ella... Excepto por el libro. A Mo le cuesta mucho no poder responder las preguntas de su hija sobre su madre y los viajes; especialmente cuando un hombre de cabellos rubios con tremendas cicatrices en el rostro aparece en el jardín de su casa. A Meggie le da un susto de muerte y corre hacia Mo; el desconocido se llama Dedo Polvoriento y parece ajeno a este mundo. Gracias a Dedo Polvoriento se desencadena una serie de aventuras que harán que Meggie y Mo comiencen un viaje del cual, hasta el momento, no hay vuelta a atrás; y digo hasta el momento porque me falta leer la tercera parte de la saga. 

Cuando Dedo Polvoriento llega a casa de los Folchart, lo inevitable sucede: tienen que escapar. Dedo Polvoriento regresó para prevenir a Mo. Así que tienen que esconderse, Mo acude a una vieja amiga cascarrabias: Elinor, su tía política, quien puede proporcionarles refugio en su mansión. Con la compañía de Dedo Polvoriento y su mascota, Gwin, Mo y Meggie viajan a verla. Resulta que Elinor también es una comeletras, pero a diferencia de Mo, a ella le encanta tener todos sus libros ordenados en libreros; los libreros están por toda la casa, pero los libros más especiales están en una biblioteca gigantesca a la que pocos tienen acceso. Elinor es rica y gasta todo su dinero en libros. ¿Les suena conocida esa historia? 

Una noche en la que Dedo Polvoriento le muestra a Meggie sus talentos con el fuego, Mo es secuestrado en la casa de Elinor. Y Meggie tiene que salir a buscar a su padre, ayudada por Dedo Polvoriento y de paso, también la tía Elinor los acompaña. Quien secuestró a Mo es un hombre malvado llamado Capricornio; las cosas se enredan y los amigos parecen ser enemigos, así que al final de cuentas Meggie no sabe en quién confiar. Para su asombro, descubre que su padre tiene un talento particular. Y Capricornio lo quiere por ello. Mo es un Lengua de Brujo, una persona con el poder de extraer personajes y cosas de los libros. Usando los poderes de Mo, haciéndolo leer Las mil y una noches, Capricornio logra conseguir dinero. Como Mo no logra controlar lo que sale de los libros, sin querer extrae a uno de los ladrones: Farid. 

Es entonces cuando Meggie se entera de la verdad. Una historia increíble y disparatada. En una noche de lectura, Mo y su esposa Teresa, comenzaron a leer un libro llamado Corazón de Tinta. Era un libro mágico, especial, con un mundo lleno de fantasía y muy bien construído; a Teresa le había fascinado. Pero entonces, algo extraño ocurrió: tres personajes aparecieron en la salita, donde Mo, Teresa y la pequeña Meggie estaban; y de pronto, Teresa ya no estaba más. Para colmo, los personajes extraídos fueron dos villanos que quisieron atacar a Mo en el instante: el villano principal, Capricornio, y su secuaz, Basta. El tercero era Dedo Polvoriento. Como pudo, Mo logró hacer que Capricornio y Basta se largaran de su casa: empuñó la espada que uno de ellos había traído desde el otro mundo y se quedó con Dedo Polvoriento, intentando comprender lo que había ocurrido. Con el paso del tiempo, Dedo Polvoriento decidió seguir con su propio camino, ya que no encontraba su lugar en el mundo de Mo. Capricornio ama este mundo, la electricidad y la riqueza, el poder y la maldad, y no quiere arriesgarse a regresar al asqueroso mundo de tinta, por lo que prende fuego a una pila enorme de copias de este libro. Ya no queda ninguna copia y así, el sueño de Dedo Polvoriento, el sueño de regresar a su historia, muere. 

Pero más allá de la aventura, del magnífico poder de Mo, me encanta que esta novela me hiciera pensar en tantas cosas sobe los libros; una de ellas ocurrió cuando Mo le confiesa algo a Meggie: 

Ha sucedido, me repetía sin cesar, ahora estás metido en medio de un relato, como siempre has deseado, y es espantoso. El miedo tiene un sabor completamente distinto cuando no se lee sobre él, Meggie, e interpretar el papel de héroe no resultaba ni la mitad de divertido de lo que me figuraba.

En otros tiempos, rogué demasiado al universo y a Dios para que, de pronto, una mañana amaneciera en Hogwarts porque sentía que mi vida era absolutamente asquerosa. Y no quería estar aquí, ¡quería estar allá! Y me encanta que Corazón de tinta hable de lo diferente que es leer y vivir. Porque podremos conocer muchos lugares a través de la lectura y nuestra imaginación; nuestro cerebro puede ser tan grande que podemos estar en ese lugar, ¡pero seguimos en nuestro lugar! Y leer sobre aventura, leer sobre muertes, llorar por la muerte de Dobby, no es lo mismo que vivirlo en carne propia. Y Mo lo entiende en ese momento. He leído comentarios de algunas personas que dicen que este libro habla sobre el amor por los libros pero no muestran a sus protagonistas leyendo. Sí lo hace, nos muestra a Meggie llevando libros en la maleta, abriéndolos y deleitándose en ellos, pero obviamente no hará una descripción de cinco cuartillas sobre cómo lee. Sería demasiado estático porque la acción de la lectura ocurre en nuestra mente, aunque nuestro cuerpo también tenga respuestas químicas y nos palpite el corazón tan fuerte en una escena emocionante. Ahora ellos no solo leen, también viven la aventura y no es tan emocionante como a nosotros, los lectores, nos parece. 

También está el hecho de sacar a los personajes. Pienso que sería fantástico tener a un unicornio en casa, ¿no? ¿Pero para el unicornio sería fantástico también? '¿Resistiría en este mundo? Nuevamente, Mo hace un comentario estupendo sobre esto:

Ambos sabemos la felicidad que te puede reportar sumergirte en un libro y vivir su historia unos momentos, pero salir fuera de un relato y encontrarte de repente en el mundo real no parece traer demasiada felicidad. A Dedo Polvoriento le rompió el corazón.

Y no olvidemos el hecho de que este hombre puede sacar los personajes de los libros. Sé que lo he mencionado un montón de veces, ¡pero es que es una genialidad! Además, su voz es tan aterciopelada y tan hermosa que te transporta dentro de las historias. Es un deleite escucharlo.

Meggie creyó vislumbrar en los rostros de los hombres de Capricornio dos sentimientos encontrados: miedo a lo que Mo fuera a despertar a la vida, y al mismo tiempo el deseo casi devorador de que su voz volviera a transportarlos muy lejos de allí, a un lugar en el que pudieran olvidarse de todo, incluso de la propia existencia.

Una vez dicho esto, vuelvo a la trama. Tener a Mortimer de tu lado puede ser beneficioso, pero él sabe que al leer en voz alta y extraer a los personajes de sus historias les arrebata la felicidad. Sucedió con Dedo Polvoriento. Afortunadamente, Farid logra adaptarse un poco más rápido y está mucho más tranquilo ahora que no tienen espíritus que lo persigan, aunque sigue creyendo en ellos a pesar de que está en un mundo diferente. Debido a que ahora todos están cautivos en el pueblo del que Capricornio se ha adueñado, no les queda más que quedarse en la prisión de ellos para esperar las ocurrencias del señor malvado. Mientras tanto, Mortimer desea poder hacerse con un ejemplar de Corazón de tinta. Su ilusión es volver a leer con la esperanza de recuperar a su esposa, mientras que Dedo Polvoriento quiere volver su mundo. Afortunadamente,  Dedo Polvoriemto ayuda a Mo, Meggie, Elinor y Farid a escapar, así que logran salir del pueblo. Ilusionado con la idea de recuperar a Teresa, Mo viaja con Meggie para conocer al autor de Corazón de tinta y conseguir una copia o borrador del libro. Mientras tanto, Elinor regresa a su hogar para descubrir que los malvados hombres de Capricornio quemaron todos sus libros.

A este punto, ya hemos visto cómo sacar a los personajess, cómo estos sufren al no estar en sus historias y lo diferente que es leer a vivir; por si fuera poco, Cornelia Funke anexa otra cosa espectacular: ¿Cómo se sentiría el autor al ver a una de sus creaciones? Esta es la reacción de Fenoglio, el autor de Corazón de Tinta, cuando le dicen que Capricornio anda muy vivito, haciendo de las suyas en nuestro mundo y le preguntan por qué no lo mató en su historia.

Es uno de mis mejores rufianes. ¿Por qué habría tenido que matarlo? En la vida real sucede lo mismo: los grandes asesinos se salvan y viven felices hasta el fin de sus días, mientras que los buenos, y en ocasiones los mejores, mueren. Así es la vida. ¿Por qué tiene que ser diferente en los libros?

Y sobretodo, ¿cómo sería el encuentro entre un personaje y su autor?

━Tal vez me cuente cómo termina la historia ━murmuró.

Meggie lo miró incrédula.

━¿Es que no lo sabes? ━Dedo polvoriento sonrió. A Meggie su sonrisa seguía sin gustarle. Siempre le parecía falsa.

━¿Qué hay de especial en eso, princesa? ━preguntó en voz baja. ━¿Acaso lo sabes tú? ━La niña no supo qué contestar. Dedo Polvoriento le guiñó un ojo y se dio la vuelta.

El encuentro entre el autor y su personaje es enternecedor. Yo estaría muriéndome de felicidad, con lágrimas y todo. Desafortunadamente, para Dedo Polvoriento no se siente igual. Él viene de un mundo duro, donde los bandidos están cada tanto, donde existen criaturas mágicas, donde la vida es más frágil. Así que saber su final le asusta, pero es inevitable desconocerlo porque Fenoglio es un maldito viejo que lo sigue viendo como un personaje. Así que sin tacto, le dice cómo terminará su vida. Fenoglio también ama a su villano y está muy orgulloso de su novela; cuando los hombres de Capricornio se plantan en su puerta, con el plan B en la manga, no pone mucha resistencia. Tampoco es como si hubiese podido hacer algo.

Los libros eran el único sitio en el que había hallado compasión, consuelo, felicidad… y amor. Los libros amaban a todo aquel que los abría, dispensaban recogimiento y amistad sin exigir nada a cambio, nunca se marchaban, nunca, aunque los trataran mal.

Así que la historia de Corazón de Tinta continúa con el reencuentro con Capricornio y, por supuesto, una revelación clave sobre lo que hay que hacer para destruirlo. Ocurren un montón de cosas emocionantes que no puedo contarles porque les arruinaría la lectura. Es difícil reseñar Corazón de Tinta sin hablar mucho de su trama o de sus personajes, porque Cornelia Funke realmente construyó un libro dentro de otro libro, haciendo ricos ambos universos y poblándolos con personajes que rayan en lo fantástico y lo ordinario, personajes muy humanos, con luz y oscuridad. Además de hablar sobre los libros y los personajes, también ahonda mucho en la relación de un padre y su hija, del viaje que hacen para intentar salvarse el uno al otro; sobre cómo las personas que aman los libros y vivir encerrados en muros y páginas, realmente disfrutan de la compañía de ciertas personas y de pronto eligen a esas personas por sobre los libros.

Lo dije antes, esta saga fue uno de los mejores descubrimientos y de las lecturas más entrañables del 2016. Es absolutamente diversa, llena de aventura, con un mundo lleno de fantasía bien construido y personajes fuertes. Y creo que permanecerá conmigo hasta el final.