10.6.11

Música al Libro (1): Quiet in My Town - Ciudad de Cristal

No pretendo que todos estén de acuerdo con la canción, en combinación con este pequeño extracto de Ciudad de Cristal (Cassandra Claire). Pero quiero compartirlo con ustedes porque desde hace tiempo me trae rondando en la cabeza.

Pongo sobre la mesa esta advertencia: esto es SPOILER. Aquel que lea el fragmento lo hace bajo el riesgo de arruinar sus expectativas para esta obra o arruinar una posible lectura a futuro. Si están seguros de querer hacerlo, entonces… ¡Adelante!


Devoré los libros de la Saga Cazadores de Sombras hace dos meses. De verdad, los devoré. Apenas terminaba uno, ya iba corriendo a comenzar el otro. Aun con la rapidez en que lo hice, disfruté de los escenarios, los personajes, la narración y sí, -¿porqué rayos no?-, de Jace y Simon. Me parece que he cambiado la forma de leer. Antes, solía hacerlo y seguir haciéndolo sin crear teorías ni hacer suposiciones. Pero ahora soy diferente, ahora, analizo, pienso y mi mente crea teorías a la velocidad del rayo –bueno, no tan rápido, pero me gusta la expresión-. Así que estaba creando teorías, pensando en que en las guerras siempre tienen que haber decesos y mucho mejor si hay un deceso de un personaje conocido y entonces, ocurrió esto:

«Allí estaban ellos, los Lightwood: Maryse con los brazos alrededor de Isabelle, que estaba sollozando, y Robert Lightwood que estaba sentado en el suelo sosteniendo algo… no, a alguien, y Clary pensó en la primera vez que vio a Max, en el Instituto, tendido lacio y dormido en un sofá, las gafas puestas torcidas y la mano arrastrando por el suelo. Él puede dormirse en cualquier sitio, había dicho Jace, y casi parecía como si estuviera durmiendo ahora, sobre las rodillas de su padre, pero Clary sabía que no lo estaba haciendo.»

Incluso en las páginas previas al fragmento de arriba, ya estaba pensando en que el comportamiento de Sebastian no predecía nada bueno. Y cuando leí eso se me escaparon unas lagrimillas. ¿Por qué los autores hacen eso? –¡Oh, se los agradezco! Hacen todo más emocionante–.

J. K. Rowling lo hizo con Dobby –sigo llorando al leerlo y verlo en pantalla– y ahora Cassandra Claire lo hace con mi bello Max, que desde que lo vi entrar en escena me pareció un personaje muy bonito, frágil, encantador. Y ahora… bueno, ya saben lo que pasó.

Así que pensé en cómo debió haberse sentido toda la comunidad de Cazadores en ése entonces. No solo fue la muerte del pequeño Max sino de muchos otros en el enfrentamiento a los demonios que comandaba Velentine. Y es aquí donde aparece esta canción, Quiet On My Town, de Civil Twilight. Es un honor, presentarles estos fragmentillos –que según yo, se acomodan a la perfección con la situación descrita–.



"Hoy, escuché que alguien dejó este mundo,

Que alguien desapareció, sin dejar una huella

Hoy, escuché que alguien se levantó y se dejó ir,

Yaciendo en el piso.

Hoy mi pueblo está silencioso ".

“Alguien diga algo,

Alguien diga algo,

Alguien diga algo porque ya no soporto este silencio”




Pienso que esta canción describe la pena que se siente al perder a alguien. La mayoría de las personas creen que no dejan huellas, pero claro que lo hacen. Dejan huellas en nuestros recuerdos, sean buenos o malos. Huellas que perduran en la mente de muchos –a menos que durante toda tu vida hayas estado totalmente solo, cosa que dudo mucho-. Y al menos, en las pocas veces que he asistido a eventos funerarios, he notado que hay un silencio –a pesar de los murmullos- inquietante que no se va. Y al menos en mi experiencia, en algunas ocasiones he querido desaparecerlo, porque tampoco creo soportarlo más.
He pensado en que “Quiet On My Town” podría ser acomodada en muchas escenas en las que debemos decir adiós a nuestros personajes –y personas- favoritas.

Pd: Siento todo estoy muy formal, espero que con el tiempo me vaya aflojando un poquitín más. Ojala que les guste.

3 comentarios:

  1. Preciosa entrada, yo por ahora no se lo que es perder a alguien muy importante, y espero no saberlo durante muchisimos años mas. Pero hace muy muy poco murio el padre de una buena amiga, y la verdad que es cierto todo lo que dices. Dejamos huella aunk creamos que no, incluso en momentos tan tristes como el velatorio de una persona a veces no puedes evitar empezar a recordar momentos de esa persona, y aunk solo tengas ganas de llorar se te escapa una sonrisa. Pero esa es la belleza de la vida, es fragil, un sueño, nos aferramos a ella como niños a su madre y es inevitable el dia de echar a volar...
    Gracias por este precioso momento de reflexion :)

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  2. Ayyy sí, yo lloré muchísimo con esa escena :(
    ¿Por qué nos hacen sufrir así?

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  3. Centinela, sí, era la segunda parte :)
    Creo que también te contesté en el post que lo preguntabas :):):)

    Un beso.

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