Reseñas de cine | El estudiante

Director: Roberto Girault Facha
Guión: Historia de Gastón Pavlovich. Adapatación cinematográfica por Roberto Girault.
Actores: Jorge Lavat (Q.E.P.D.), Norma Lazareno, Cristina Obregón, Siouzana Melikian, Jorge Luis Moreno, Cuauhtémoc Duque, entre otros.
Sinopsis: "El estudiante" es la historia de un grupo de jóvenes y de un hombre de 70 años, llamado Chano, quien acaba de inscribirse en la universidad para estudiar Literatura, y que con una marcada actitud quijotesca, romperá la brecha generacional. Así, en un encuentro de costumbres y tradiciones diferentes, compartirán deseos y enseñanzas, pero también, en medio del romance, la amistad y la intriga, tendrán que superar distintas pruebas de vida. 

"Solo la luz de la vela es necesaria para alumbrar nuestra imaginación."

Opinión Personal:

Antes de empezar, tengo que decirles que solo tengo dos películas mexicanas favoritas: “La otra familia” y “El estudiante”. Hasta hace una semana solo tenía a la primera que he mencionado. Es que, no sé si han visto cine mexicano moderno; pero de las pocas películas que he visto, contienen imágenes muy cachondas y sexuales que no me van. No entiendo porqué se empeñan con incluir escenitas de ése tipo y porqué, se exceden en ello. Así que ha sido bonito encontrarme con historias profundas, que me hacen reflexionar mucho, que transmiten un mensaje y que no contienen escenas sexuales. Ok., cambio de opinión porque me parece que “La otra familia” sí trae  dos o tres desnudos pero ¡cuenta una historia llegadora! Y bueno… ya no parloteo más de lo debido.

¿Por qué creo que deben ver “El estudiante”? En primer lugar, la historia es divina. Segundo, aborda multiples temas. Tercero, te hará pensar.  Cuarto, la forma en que está contada es muy ligerita, bonita, emocional y llegadora. Quinto, las actuaciones de grandes actores como Jorge Lavat (y su adorable voz).

La historia gira en torno al Señor Chano, que con sus 70 años decide comenzar a estudiar la universidad. Y allí empezamos con el primer tema: ¡¿qué?! ¿Estudiar tú? ¡Pero si ya estás viejo! Pues la edad no debe ser un condicional para estudiar. Y nos vemos las caras con la esposa, las dos hijas, el yerno y los compañeros adultos mayores de Don Chano. Su esposa, al principio, está un poco recelosa ante esa idea tan genial de su maridito. Pero como siempre, ella como su columna y compañera fiel, lo apoya. Las hijas; una dice: no, papá. No puedes estudiar. Y la otra, en cambio: ¡sí, papá! El yerno: ¡qué bien, Don Chano! Y los  compañeros: ¿Y a este qué le picó? Y Don Chano, sin importar que los perros ladren, se avienta a la Universidad a estudiar Literatura.

Es allí, en la Universidad de Guanajuato, donde conoce a un grupo de muchachos con los que comienza a entablar amistad. Pero no fue fácil para Don Chano, porque tuvo que acercarse poco a poco e integrarse, aprender y entender el vocabulario de los jóvenes. En esos momentos, se planea hacer la presentación de “El Quijote de la Mancha” en teatro y esos muchachos son los actores que han sido seleccionados para los papeles estelares. Pero Don Chano ha querido participar en la obra, puesto que le han dicho que se parece al Quijote, pero el director le dice terminantemente que es mejor que no haga la audición. Por su edad, simplemente no.

Y así pasa el tiempo, entre ensayos, clases, problemas… Las cosas no van tan bien para ninguno de los muchachos. Uno, tiene problemas con la droga y el alcohol. Otro, está enamorado de una chica que tiene una relación con un profesor. Luego, una chica está enamorada de su novio pero él quiere algo más. ¿Saben de qué hablo, verdá? No todos quieren esperar al matrimonio para hacer el amor. Y así vamos, problemitas por aquí, problemitas por allá…

 Además, la puesta en escena del clásico de Saavedra no va bien.  Afortunadamente, Don Chano se encuentra allí. ¿Y qué otra persona mejor que él para ayudarlos? Con sus años, el respeto que inspira, la admiración con la que cuenta y su habilidad para llevarse con los más jóvenes, lo convierten en un muy buen amigo y consejero. Y es así como se desarrolla esta historia en la que se tratan temas reales, un tanto crudos y tristes. Pero la amistad prevalece y siempre, siempre, siempre, puedes continuar aprendiendo.

¿Y qué creen? Lloré mucho. Hubo escenas en las que me identifiqué con Don Chano. Una en particular, en la que la profesora pide que hagan cuatro equipos y él se queda solo. Adivinen quién es así.

La verdad es que siento que ya los he espoleado bastante, así que ya mejor detengo a mis manitas para que no escriban más. ABSOLUTAMENTE RECOMENDABLE. LLEGADORA HASTA EL ÚLTIMO MINUTO. UNA HISTORIA REAL. UNA IDEA QUE ME HACE PENSAR: ¿LES DAMOS SUFICIENTE VALOR A NUESTROS ADULTOS MAYORES? ELLOS SON VALIOSOS, SON SABIOS… ¡Y TIENEN MUCHAS COSAS POR CONTAR!

"Las grandes obras están llenas de sabiduría, de vida, pero para encontrarla hay que hacerla nuestra y para entenderla hay que compartirla; decirla, no solo leerla; explicarla, no solo escribirla. ¿Me entendiste?"

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